Camagüey, 17 feb.- Con sus 12,5 kilómetros cuadrados, el consejo popular (CP) Julio Antonio Mella, al sureste de esta ciudad, no solo es uno de los más extensos del municipio capital de la provincia, sino que reúne una compleja estructura económica y social, mitad urbana, mitad rural.
Además de importantes instalaciones fabriles y de servicios, tiene la mayor concentración de edificios altos de la demarcación.
Los límites del CP están dados por la Carretera Central por el norte y el este; el Consejo Popular Vista Hermos al oeste y al sur, punto de confluencia con el reparto La Esperanza de ese Consejo y el arroyo Salvaje. Posee populosos repartos, entre estos Marquesado, Julio Antonio Mella (Montecarlos), Valentín Álvarez, El Paraíso, Salomé, El Diamante y Charles Muecke (La Mosca).
Los dos últimos pueden ser los más antiguos repartos del actual Consejo, el primero surgido de humildes viviendas agrupadas a la sombra del cuartel militar El Diamante (espacio hoy ocupado por el Instituto Politécnico Manuel Cañete Ramos) que formaba parte de la defensa que el Ejército Español levantó para la defensa de la ciudad durante la guerra de 1868.
El segundo fue parcelado entre numerosas fincas vinculadas con el Camino Real de La Habana en el entonces partido Sabana Grande.
En 1915 el neoyorquino y Comandante del Ejército Libertador, Carlos Mueke Bartel parceló un potrero conocido por La Mosca en su finca La Caridad. A las seis calles, cuatro de norte a sur y dos de este a oeste, les puso el nombre de cuatro estadounidenses y dos canadienses muertos todos al servicio de Cuba durante la guerra por la independencia.
A partir de la prolongación de estas por el barrio Marquesado hasta el camino del Jigüey, hacia el reparto Paraíso al este y El Diamante por el oeste, surgieron pequeñas comunidades que comunicadas entre sí en su desarrollo conformaron el actual territorio.
En la década de 1950 inmobiliarias locales construyeron el reparto Montecarlos, uno de los más lujosos y modernos de entonces, con casonas junto a las cuales erigió luego la Revolución los edificios multifamiliares que abrigarían a técnicos y profesionales en el nuevo reparto Julio Antonio Mella.
De su gente y sus lugares
La población del CP Mella se concentra en nueve circunscripciones con un total de 27 774 habitantes, de los que el 72 %, 19 950, son electores.
La cifra de mayores de 60 años alcanza alrededor del 62 %, elevada si tenemos en cuenta su alta densidad poblacional, especialmente hacia el sur de su territorio, debido a numerosas familias procedentes de otras provincias y municipios camagüeyanos, cuyo asentamiento espontáneo y desorganizado ha generado no pocos contratiempos habitacionales y para la prestación de servicios sociales.
El 65 % de los ancianos mayores de 70 años viven solos, aunque muchos son atendidos por los trabajadores sociales y los médicos de la familia.
Entre la multitud de importantes unidades productivas, instalaciones de servicios públicos y centros educacionales se encuentran la Empresa Geominera, el Hotel Camagüey, la Base de Transporte para el Turismo, el Jardín Botánico, el complejo recreativo El Lago de los Sueños, las CCS Renato Guitar y Primero de Enero, cinco organopónicos, 121 pequeñas fincas para la producción agrícola (entre ellas una casabería), 13 escuelas, dos secundarias, la Escuela Pedagógica y 14 consultorios del médicos de la familia.
La mayor concentración de edificios altos en Camagüey la posee el CP Mella; dato significativo si tenemos en cuenta que nuestra provincia es la segunda de Cuba con este tipo de construcciones.
Allí hay 113 edificios multifamiliares, de ellos cuatro de 12 pisos y uno de 18 plantas; sin embargo, alrededor del 53 % del fondo habitacional del resto de la demarcación se clasifica como de regular a malo, especialmente en las circunscripciones 33, 34 y 142.
Todo ello lo supimos por Manuel Arias Carmenates, delegado de la circunscripción 142 y presidente del “Mella”, conocedor palmo a palmo del área, su gente y sus conflictos.
Pues sí, con un Consejo Popular tan influyente en el municipio de Camagüey y con tantos centros productivos y sociales asentados en el territorio se hace difícil imaginar la mala situación que enfrentan algunos espacios debido a desatenciones y violaciones de regulaciones urbanas acumuladas por años.
Arias Carmenates tiene siempre bien a mano los principales planteamientos de sus electores relacionados con hasta ahora insolubles problemas de reparaciones de calles, atención a los edificios altos y a las viviendas, la ruta suspendida de ómnibus que llegaba hasta el reparto Marquesado y la recogida de desechos sólidos.
“Tenemos un gran problema en la calle que divide las circunscripciones 34 y 124, entre los repartos Salomé y Nuevo Salomé, donde corre una zanja en cuyas márgenes viven 13 familias que deben ser reubicadas. Por otra parte, no hemos podido contratar a carretoneros para la recogida de desechos sólidos a causa del papeleo que nunca terminan en los contratos con Comunales mientras la basura se nos acumula.
“Nuestras circunscripciones 32 y 34 se han clasificado como complejas, pues en esas zonas hay muchos y viejos planteamientos sobre reparaciones de las vías y ayudas para reparar viviendas, además de tres puentes, dos de ellos peatonales, que desde hace mucho ha solicitado la población”.
El ingenio de salomé
Lo único que sé de Salomé es que fue una princesa allá por el país persa del año 65 de nuestra era, hija del rey Herodes Filipo I, bailarina ella y protagonista de historias prohibidas para menores de edad. Por alguna historia o razón que desconozco, en Camagüey se asentó un reparto con ese nombre, donde se conforma la circunscripción 34, al sur del Consejo Julio Antonio Mella, con 1 556 habitantes.
“Esta comunidad se ha desarrollado como barrio espontáneo, explica Alberto Riera García, delegado de la circunscripción, nos llega una gran migración desde muchos lugares. Hoy tenemos un fondo habitacional de 1 127 viviendas, y de ellas el 66 % son ilegales, 80 presentan mal estado constructivo y otras 17 en situación crítica, apuntaladas”.
Afirma Riera que se ha recuperado en más de un 80 %, pero aún debe lidiar con cómo resuelve los pisos de tierra de 482 casas, para lo cual se ha creado un programa de prioridades, así como planteamientos acerca de la recogida de desechos, y aunque la empresa Cupet, que les apadrina, ayuda en dicha limpieza con una carreta no siempre puede acudir en auxilio del territorio.
Era tanta la basura acumulada en Salomé que tomaron una decisión ingeniosa; sobre tres de estos basureros la comunidad hizo organopónicos para la siembra de viandas y verduras de ciclo corto y sobre otro construyeron un parque.
No son aislados estos desvelos. Ejemplos así emergen en todo un país cuyo pueblo encuentra justo en el momento de la verdad ciencia social y conciencia política para emprender tareas que pueden parecernos mayores a nuestras fuerzas, pero no imposibles.
Los días como hoy nos demuestran que unidad no es solo una palabra de consigna, significa la llave que abre puertas al desarrollo en medio de tantas adversidades externas y complejidades adentro.
Es el ejemplo de la Revolución cubana que triunfa todos los días, donde cada amanecer es el resultado del trabajo cotidiano a pesar de la pandemia y las estrecheces. Triunfa con sus sueños y esperanzas en un quehacer indetenible hacia el futuro. (Eduardo Labrada Rodríguez/ Adelante) (Fotos: Leandro Pérez Pérez/ Adelante)