Vigencia de la Protesta de Baraguá

Con su actitud, Maceo y sus seguidores, a la vez que salvaron su honor de combatientes enaltecieron el de Cuba, legando a las generaciones posteriores la posibilidad de proclamar con orgullo que, desde el primer empeño, los revolucionarios cubanos jamás han sido vencidos ni derrotados.

La protesta de Baraguá llegó a su punto más alto, llegó a su cumbre el espíritu patriótico de nuestro pueblo; y que las banderas de la patria y de la revolución, de la verdadera revolución, con independencia y con justicia social, fueron colocados en su sitial más alto.

Después de eso, y hasta hoy, las horas de peligro para Cuba no han sido pocas; y en ninguna faltaron arribistas, que, en busca de fama,  cumplen la orden de calumniar a la patria, la venden, y hasta piden para ella una agresión.

Los trabajadores de comunales comprometidos cada día y orgullosos de su Patria reafirman y expresan el amor a la independencia y a la justicia social.