Camagüey- Primero llegó Roger Meriño a contar que su trombón imita la voz humana y puede acariciar con el sonido. Luego se acercó con el saxofón en brazos un joven medio tímido llamado Roslay Rodríguez. Por último, Félix Charles Ryan colmó de asombro al presentar la tuba, un instrumento con nombre de flaco pero es más grande y gordo que su dueño.