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Camagüey- Entre glissade, cambré, brissé y arabesque, entre muchos otros pasos del bello arte de danzar en puntas, pero ahora desde casa, transcurren los días del primer bailarín del Ballet de Camagüey (BC) Yanni García.

Desde que se decretó en el país la necesidad de mantener un adecuado aislamiento social como medida para frenar la propagación de la COVID-19, este artista diariamente hace de la sala de su casa su salón de entrenamiento.

Aunque estemos obligados a estar en nuestros hogares no significa que dejemos de mantenernos creativos, y mucho menos de ejercitarnos diariamente, aseveró a la ACN, pues siempre podemos mantenernos en activo, y aunque sea por breves momentos dedicarnos a ejercitar el cuerpo y la mente.

Desde sus perfiles en las redes sociales, este creador ha reiterado en varias ocasiones la importancia de permanecer en casa y de ser responsable con el cumplimiento de las orientaciones para evitar la propagación y contagio del coronavirus.

Nunca me cansaré de reiterar que todos debemos ser responsables, dijo, pues es muy lindo mantener la esperanza de reunirnos otra vez, cuando la pandemia culmine, asistir a esas funciones aplazadas, tomarnos esos cafés pendientes, y tantas cosas simples ahora tan añoradas.

De igual manera opina la primera bailarina de la prestigiosa compañía lugareña Rosa María Armengol, quien además de subir a las redes sociales coreografías danzadas desde casa para mantenerse en activo, también lo ha hecho con pequeños videos dirigidos a sus estudiantes de tercer año.

El bailarín nunca debe permanecer inamovible, porque mantener la creación siempre en activo es un deber, y a la vez, la mejor manera de seguir perfeccionando nuestra vocación, aseveró.

Regina Balaguer, directora general del BC, comentó que se ha mantenido en comunicación con los miembros del colectivo y desde sus hogares continúan ejercitándose, pues así también se desarrolla la necesaria disciplina para ejercer con destreza y calidad ese arte.

Texto y foto: ACN