El cuerpo humano está expuesto a agentes externos que pueden producir enfermedades, cuando se produce un contagio el cuerpo puede defenderse mediante su sistema inmunitario, sin embargo evitar el riesgo garantiza una vida sana por eso es necesario mantener la higiene.

En estas imágenes de La Belén  se puede apreciar el trabajo  abnegado, sistemático y eficiente de los trabajadores de Servicios Comunales contrario a lo que llamamos indisciplinas sociales, el cuidado de los contenedores plásticos es un deber y su uso correcto un compromiso ciudadano.

Camagüey merece lo mejor.Mensaje de los trabajadores de Servicios Comunales

Este 17 de febrero estaría cumpliendo 94 años de edad el Comandante de la Revolución Juan Almeida Bosque, aquel valiente político y guerrero con alma de artista, que se ganó un lugar en el corazón de los cubanos.

Hay una frase suya que lo inmortalizó para la Historia. Sucedió durante la sorpresa de Alegría de Pío, cuando ante el llamado a la rendición por parte de los soldados de la tiranía batistiana, alzó su voz enérgica: “Aquí no se rinde nadie..

 Seguimos construyendo nuestro socialismo, pese lo que le pese porque nosotros somos invencibles. Aquí no se rinde nadie.

Viva el Comandante Almeida.

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"Se sale de la tierra tan contento cuando se ha hecho una obra grande"

                                                                                José Martí

El apoyo no se hizo esperar,la Brigada Provincial de Servicios Comunales trabaja en coordinación con sus compañeros floridanos en el empeño de la higiene de la ciudad comprometidos todos en el enfrentamiento a la Covid-19

Es una noche especial donde un grupo de trabajadores de los Servicios Comunales limpian el Parque  Agramonte con disposición y alegría, no sólo es trabajo, es orgullo, es historia de la ciudad que rememora hechos inolvidables.

Este pintoresco paseo, el primero que se erigió en Camagüey en tiempos de la dominación española, tiene una hermosa historia, allí fueron fusilados los primeros revolucionarios camagüeyanos, Joaquín de Agüero, Fernando de Zayas, Miguel Benavides y Tomás Betancourt.

Cuatro palmas reales fueron sembradas en su homenaje  para consagrar su memoria como un medio ingenioso para burlar a los españoles.

Árbol bello, símbolo de la victoria en  la que la nueva generación cubana vive feliz y libre a su sombra.