Camagüey.- El Centro de Investigaciones de Medio Ambiente de Camagüey (CIMAC) exhibe avances sustanciales en el proyecto “Adaptación a los efectos del cambio climático en los ecosistemas marino-costeros del Norte de la provincia de Camagüey”, que lidera en la provincia desde el año 2018.
Un equipo de investigadores y especialistas del CIMAC evaluará la vulnerabilidad ante el impacto del cambio climático de varias especies que incluyen una selección de plantas terrestres y marinas, manglares, lagartos diurnos, moluscos terrestres, aves acuáticas y peces.
El M.Sc. Omilcar Barrio explicó que identificarán las especies altamente vulnerables, a las cuales estarán dirigidas las medidas de adaptación fundamentales, así como las potencialmente adaptables, las potencialmente persistentes y con alto riesgo latente.
El estudio prevé la elaboración de los modelos de distribución potencial de las especies y el diseño de planes de adaptación con medidas de protección jurídica o conservación.
“Este proyecto ha sido un reto porque su mirada es hacia el futuro, y ha requerido que los investigadores se empoderen de los abordajes científicos sobre los impactos del cambio climático en la biodiversidad a nivel internacional para contextualizarlos en nuestro país”, comentó la M.Sc. Nereyda Junco Garzón, directora del centro y coordinadora del proyecto.
Otra de las aristas del proyecto está relacionada con la caracterización de los procesos costeros, la vulnerabilidad, impactos y medidas de adaptación ante los efectos del cambio climático en la zona costera.
El área de estudio abarca 19 playas y los escenarios comprenden a Cayo Sabinal, Cayo Cruz, Cayo Romano y Santa Lucía.
Según refirió la M.Sc. Isis Hernández Sosa entre las tareas ejecutadas destaca la actualización del comportamiento de los procesos erosivos de las playas a partir de los resultados del monitoreo. Agregó que también se cuenta con la evaluación o recuperación de la playa ante la ocurrencia de eventos meteorológicos extremos.
Los resultados del Macroproyecto “Escenarios de peligros y vulnerabilidad de la zona costera cubana, asociados al ascenso del nivel medio del mar para los años 2050 y 2100” son referentes para este proyecto, subrayó Junco Garzón.
El proyecto también concibe el diseño de un sistema de monitoreo de los impactos del cambio climático en los ecosistemas que son objeto de estudio.
La M.Sc. Grisel Reyes Artiles, subdirectora científica del centro, refirió que se ha trabajado en el refinamiento del marco conceptual y metodológico que sustente el sistema de indicadores.
“Como parte del estudio comprendimos que era importante precisar sobre la base de qué normas, estrategias y planes nacionales e internacionales íbamos a estar construyendo ese sistema, pues si estamos diseñando un sistema de indicadores para la toma de decisiones, este debe responder a esos requerimientos”, acotó Reyes Artiles.
El equipo de trabajo consideró pertinente identificar aquellos atributos relevantes del ecosistema y de sus componentes que permitan evaluar la vulnerabilidad ante el cambio climático, así como otros aspectos que facilitan el análisis del contexto.
El sistema, que actualmente se encuentra en la etapa de elaboración, contiene indicadores de presión, de impacto, de estado y de respuesta ante los efectos del cambio climático.
(Damaris Hernández Marí/CIMAC)
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